ESPINAL. En un trabajo de investigación de los sabuesos de la Sijín de la Policía del Tolima, se logró la desarticulación de la banda ‘Los Tacks’, dedicada al hurto y homicidio en El Espinal. Ellos habían ampliado su rango de acción a Flandes, Guamo y Girardot.
Inició el 29 de octubre luego del homicidio del vigilante de Usocoello y del familiar del dueño del predio en el sector Changay, ubicado en la vereda Canastos de El Espinal, en la finca de Hernando Gómez.
El día de los hechos, el vigilante Eduardo Bohórquez perdió la vida cuando se opuso al atraco y le robaron el revólver calibre 38 con cacha café. Allí resultó herido Alirio Cortés Devia, conocido como ‘Yiyo’, quien era cuñado del dueño del predio. Al parecer ‘Yiyo’ reconoció a uno de los atracadores por el tono de su voz, lo que provocó que le dispararan.
A partir de esa información, los investigadores llegaron hasta alias ‘Careplancha’, quien era un trabajador cercano al predio de arroz y era quien habría dado información a la organización.
Siguieron el rastro hasta el barrio Nacional de El Espinal, donde empezó la indagación y residiría la mayoría de los integrantes de la banda. Es así como obtuvieron entrevistas, fotos, interceptación de comunicaciones y denuncias de una fuente no formal, por temor y el actuar delictivo de la banda.
Por orden judicial, capturaron a William Rivas Murillo, alias ‘Masambo’, quien sería el líder de la organización y trabajador de una empresa de fumigación. El sujeto también fue relacionado con la banda ‘Los Tachuelos’.
Albeiro Mejía Triana, alias ‘Cofla’, en cuyas viviendas hallaron dos armas de fuego. Juan Guillermo Guzmán Ortiz, alias ‘Careplancha’, quien habría entregado información sobre las personas a hurtar y Diego Fabián Quintero Ruge, alias ‘Levadura’, que tenía detención domiciliaria desde noviembre de 2019 por hurto.
Los allanamientos
En el operativo efectuaron 19 diligencias de allanamiento en casas ubicadas en los barrios Nacional, Fátima, Saucedal, Villa Catalina y Centro. En la veredas El Peñón, Sucre y Paso Ancho, dos de ellas, en viviendas propiedad de alias ‘Cofla’.
En una de las casas hallaron en el patio un bolso con la pistola 9 milímetros Sig Sauer, que le fue hurtada el 11 de septiembre de 2019 a un comisario de policía, quien resultó herido en una pierna. Esta arma de fuego habría sido utilizada durante el atraco donde falleció el vigilante de Usocoello Eduardo Bohórquez y Aliro Cortés.
La Policía investiga si la pistola también fue usada en otros homicidios como el ocurrido el 20 de febrero cerca del Parque Mitológico de El Espinal, donde fue asesinado Delio Augusto Aros, quien se dedicaría a leer las cartas. En la otra casa de alias ‘Cofla’, fueron detenidos Fabio y Kelly.
Allí encontraron debajo del colchón de una cama, un revólver calibre 38 largo de cacha café, que al parecer sería el que fue hurtado al vigilante de Usocoello. La pareja después de las audiencias recobró su libertad, pues le achacaron el delito de porte ilegal de armas, pero estarían vinculados a esta organización criminal.
En otros inmuebles, los uniformados hallaron un revólver calibre 38, dos computadores portátiles y 18 celulares que serían hurtados. Todos estos elementos de prueba serán sometidos a experticias, para conocer su procedencia y luego serían devueltos a sus propietarios.
El doble homicidio
La noche del 29 de octubre de 2019, cinco sujetos en motocicleta encapuchados, con cascos cerrados y con guantes llegaron a atracar en un lote de arroz ubicado en el sector Changay, vereda Canastos de El Espinal, propiedad de Hernando Gómez. Allí asesinaron al vigilante de Usocoello, Eduardo Bohórquez (gorra), a quien le hurtaron el revólver de dotación e hirieron a Alirio Cortés Devia, quien falleció en la Clínica Nuestra de Ibagué. Este último es familiar del dueño del predio.