IBAGUÉ. Un adolescente asesinó a un ciudadano en la comuna Siete de Ibagué. Los problemas por el consumo de sustancias alucinógenas habrían sido la causa del homicidio. No obstante, la Policía de Infancia y Adolescencia de la Metropolitana aprehendió al culpable.
Historia. La tarde del miércoles, Orlando Montoya Mejía, conocido como ‘Pereira’, estaba sentado en un andén del barrio Modelia II por la calle 159 con carrera Octava, a donde llegó Y.C.O.O., de 17 años de edad, con un cuchillo en su mano. Al parecer, sin mediar palabra le propinó una puñalada en el cuello a Montoya.
Tras el suceso, los vecinos se aglomeraron en el lugar y en medio de la algarabía le prestaron auxilio. Montoya Mejía fue llevado hasta las urgencias de la Unidad de Salud de Ibagué, sede El Salado, donde los médicos de turno lo atendieron. Sin embargo, la hoja de metal le produjo una herida de gravedad, por lo que tuvo que ser trasladado hasta el Hospital Federico Lleras Acosta, sede La Francia.
Emili Vásquez, compañera sentimental de Montoya Mejía, señaló que: “Ellos tenían problemas desde hace mucho tiempo, entonces el muchacho llegó y lo agredió.
“Orlando se sentó en el corredor y el otro se salió con un cuchillo y lo agredió. Ellos consumían alucinógenos”.
En el principal centro asistencial, ‘Pereira’, quien vivió por varios años en el barrio Modelia, fue intervenido quirúrgicamente para salvarle su humanidad, no obstante, sobre las 11 de la noche la familia de la víctima recibió una fatal noticia: Orlando no resistió la puñalada y falleció.
Según Vásquez, la progenitora del joven que mató a Montoya Mejía lo entregó a las autoridades.
En el reporte oficial, la Policía Metib indicó que la aprehensión de Y.C.O.O. fue en la calle 159 con carrera Octava.
En medio de la diligencia judicial, el cuadrante que atendió el caso se incautó de un arma blanca tipo cuchillo avaluado en 10 mil pesos, la misma que habría utilizado el ‘pelao’ para cometer el crimen.
El muchacho fue dejado a disposición del Centro de Servicio Judiciales para Adolescentes por el delito de homicidio.
La víctima. Desde hacía dos años Montoya Mejía había iniciado una relación sentimental con Emili Vásquez. Del amor que se tenían nació hace dos meses una niña. Actualmente no trabajaba y mantenía por las principales calles del barrio, aunque en ocasiones se desempeñaba como vendedor ambulante. Residía en la manzana 112A casa uno. Era fiel hincha de Nacional y entregado a su familia.
