Casi mata a machetazos a un rezandero

ARMERO GUAYABAL. Casi cinco meses después de haber atacado a un rezandero con un arma blanca, personal de la Sijín Detol hizo efectiva la orden de captura que pesaba sobre un hombre, de 24 años de edad, por el delito de homicidio en la modalidad de tentativa por hechos que ocurrieron en Armero Guayabal. Según una fuente policial, el agresor señaló a la víctima de hacerle brujería.
El ataque. Se trató de Camilo Hernán Ciprián Sánchez, quien al parecer la tarde del 26 de junio abordó a un reconocido curandero y rezandero, de 82 años, en cercanías al estadio de Armero Guayabal, al que le propinó lesiones en su cabeza, antebrazo y espalda con un machete. Presuntamente Ciprián Sánchez afirmó ser objeto de brujería por parte de su víctima, lo que supuestamente lo motivó a cometer el ‘brutal’ ataque.
Según las autoridades, el agresor huyó de la escena pero horas más tarde la compañera sentimental de la víctima lo reconoció en fotografías, fue así que el Juzgado Primero Promiscuo de Lérida emitió la orden judicial en contra de Ciprián Sánchez.
La víctima, que sufre de alto nivel de azúcar en la sangre, fue valorada en el hospital de ese municipio, trasladado a la capital tolimense para su atención y por último remitido a un centro asistencial en Bogotá.
Una fuente policial le explicó a Q’HUBO que las lesiones le produjeron secuelas al hombre, pues perdió su movilidad y debe ser asistido para realizar cosas básicas de la cotidianidad como bañarse.

Reincidente. Al parecer Ciprián Sánchez registra dos capturas por porte de estupefacientes, así mismo en abril pasado atacó a Juan de Dios Barragán, otro rezandero de 54 años, al que también acusó de que le hacía brujería.
En esa oportunidad le ‘acomodó’ ‘machetazos’ en la cabeza, brazos y una mano. El afectado fue atendido en Armero Guayabal y remitido al Líbano.
Para entonces Ciprián Sánchez fue judicializado y recobró la libertad.

La captura. Ciprián Sánchez después de agredir al hombre huyó a Caldas, donde se refugió en municipios como Manzanares, Chinchiná y Manizales. Pero el fin de semana retornó a Armero Guayabal, así que los pobladores dieron aviso a las autoridades y fue detenido.

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