IBAGUÉ. Otro caso de violencia intrafamiliar acabó con la vida de una mujer en la Capital del Tolima. Esta vez, el quinto feminicidio del año, ocurrió el fin de semana en el exclusivo sector de El Vergel e involucra a un reconocido empresario de la ciudad.
La historia. Para amigos y conocidos, la familia Salinas Herrada era una familia casi perfecta. Gracias al espíritu emprendedor de Édgar Augusto Salinas, su esposa Nidia Jazmín Herrada Céspedes y sus hijos, gozaban de estabilidad financiera y los viajes y las celebraciones eran frecuentes en ellos. Sin embargo, una noche de copas terminó en tragedia y partió en dos la vida de la pareja y sus tres hijos.
En una reunión. Según se conoció en la audiencia de legalización de captura y medida de aseguramiento del agresor, el sábado hacia las 8:00 de la noche arribó a la casa 46 del conjunto residencial Cerro Azul del Vergel una pareja amiga de Édgar Augusto y Nidia Jazmín. “Según el testimonio de Sandra Paola Londoño y Fredy Osorio Bernal, ellos llegaron a visitar a sus amigos a quienes conocen desde hace 16 años. Mientras comían y bebían media botella de tequila, la pareja Salinas Herrada les contó la experiencia de su último viaje a Cancún”, aseguró la delegada de la Fiscalía. “La testigo Sandra Paola agregó que hacia la 1:00 de la madrugada, ella y su amiga (la hoy occisa) se acostaron en la cama de la habitación del primer piso de la residencia, pues estaban cansadas”, dijo la Funcionaria. “De un momento a otro la señora Sandra ve que el señor Édgar Augusto entra a la habitación de manera agresiva con cuchillo en mano y se lo entierra a su esposa en el pecho sin darle tiempo de reaccionar. Ella se alcanza a parar y forcejea con el hombre. Le trata de quitar el cuchillo”, añadió la Fiscal de la URI que atendió el caso.
Solicitud. El abogado de confianza del presunto agresor le solicitó al Juez de Control de Garantías de Valle de San Juan tener en cuenta que el hombre actuó bajo “ira e intenso dolor y no supo manejar las emociones al haber encontrado a su esposa arepiando” (Sic), es decir, habría hallado a la señora en una situación comprometedora con otra mujer. Aún con la solicitud, el Togado decidió enviar al empresario a la cárcel.
Pronunciamento. “Esta-mos siendo muy intolerantes. Falta diálogo en los hogares. Uno se imagina que en el estrato Seis las mujeres conocen sus derechos, pero vea lo que pasa. (…) Muy triste que una mujer ya no esté segura ni en su hogar”, dijo Estella Gordillo, de la Red de Mujeres, respecto al caso.
