IBAGUÉ. Las autoridades indagan las circunstancias en que Jhon Jairo Urueña Montealegre, de 35 años, resultó muerto luego de haber salido de Bogotá con una fuerte cantidad de dinero en efectivo, y nunca llegó a Ibagué.
El cuerpo del comerciante de mercancía americana fue encontrado 400 metros antes del retorno al municipio de Flandes y presentaba al menos seis impactos de arma de fuego.
La víctima, que traía la mercancía de Panamá, recibió dos tiros en la nuca, dos más en la espalda, uno en la ingle y otro en una pierna, de acuerdo con la versión de los familiares.
Urueña era oriundo de Ibagué y estaba radicado en Bogotá desde hacía algún tiempo; venía con regularidad a la capital tolimense por su actividad comercial y para visitar a su hija de 8 años.
Los hechos ocurrieron hace 10 días y según contó Viviana Urueña, su hermano la llamó ese jueves y le informó que viajaría en carro, que llevaba mucha plata y que dos amigos le iban a servir de escoltas.
El pasado 17 de septiembre en la madrugada el comerciante fue encontrado baleado horriblemente, al parecer por alguien que sabía que llevaba dinero y lo mató para robarlo.
El finado, quien era ingeniero de sistemas, aparentemente llevaba alrededor de 100 millones de pesos con la intención de hacer negocios, según indicaron parientes.
El vehículo, papeles y otros elementos de valor también se los llevaron; afortunadamente uno de los miembros de familia pudo ser contactada por intermedio de una ‘simcard’ que los investigadores judiciales hallaron donde fue encontrado el cadáver.
El levantamiento estuvo a cargo de personal del CTI de Espinal; el cuerpo fue velado en una funeraria de esta capital y luego recibió cristiana sepultura en el cementerio San Bonifacio.
