IBAGUÉ. Adulta mayor busca a sus hijos a quienes dejó de ver en Duitama cuando ellos tenían entre 8 y 13 años de edad.
Historia. Los años han consumido su vitalidad, pero los recuerdos retumban en su memoria como una cuota pendiente que tiene con la vida. Adelina Gómez de 103 años de edad se casó en tierras Santandereanas cuando tenía 15 años y se radicó en Duitama con su esposo José del Carmen Hernández, pero la felicidad no acompañó su unión marital, pues su cónyugue la sometía a maltratos y también la alejó de los nueve hijos que tuvieron.
“Ella cuenta que sólo pudo quedarse con mi mamá porque perdió el rastro de los otros hijos cuando el abuelo los sacó de la casa y se trasladaron al Tolima. Hace mucho tiempo le informaron que algunos habían fallecido, entre ellos mi mamá y lo único que anhela en la vida es reencontrarse con los que aún viven”, refirió Rosana Londoño, nieta de la adulta mayor.
Ana Joaquina, Nohemy, Elsa, Leonarda, Flaminio y Pascua Hernández Gómez son los hijos que Adelina dejó de ver hace más de 50 años y a quienes busca en el infinito de su mirada, remembrando entre lágrimas todo el sufrimiento que padeció y que los hizo distanciar.
La abuelita aunque no puede caminar se conserva lúcida y no consume ningún tipo de medicamento, “toda la vida he estado con ella y lo único que buscamos es devolverle el sueño de recuperar a sus hijos, porque el vacío es evidente cuando se refiere a ellos”, acotó Londoño.
En una vivienda ubicada vía al Cañón del Combeima permanece Adelina con su cabello ‘nevado’ llena de ilusión y esperanza por abrazar a los hijos que le quitó el hombre que también le dio la dicha de engendrarlos.
Tome nota: Las personas que tengan conocimiento de la ubicación de alguno de los hijos de Adelina pueden comunicarse al teléfono: 3187422327
