IBAGUÉ. El Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía realizó el levantamiento del cuerpo de un joven vigilante, que acabó con su vida dentro de su vivienda en el barrio La Isla.
Historia. La noticia del suicidio Víctor Hugo Trujillo Sandoval rodó por todo la zona y así mismo amigos, familiares y allegados llegaron a constatar su deceso.
Uno de sus ‘parceros’ arribó en moto y las lágrimas inmediatamente rodaron por su rostro al ver que era verdad, pues no creía que Trujillo Sandoval, con quien hacía pocas horas estuvo tomando bebidas embriagantes, cumplió la promesa que días antes hizo y que el ‘parche’ tomó como recocha.
Al parecer el joven, que hacía relevos en la empresa de vigilancia Cooseguridad CTA, antes de entrar a su vivienda les dijo: “Mírenme bien que es la última vez que me ven’ Los quiero mucho”.
Sobre las 9:00 de la mañana, el hoy fallecido ingresó al cuarto, donde lo hallaron sus familiares suspendido con un lazo.
Trujillo Sandoval, presuntamente también tenía cortadas en los brazos.
En medio del dolor, el sector fue acordonado y prohibieron el paso, mientras las autoridades realizaban los actos urgentes y entrevistaban a los allegados, para concocer los posibles motivos de la fatal decisión.
Momentos de tensión. Al sitio llegó una mujer, a quien la Fiscalía le impidió que se acercara y ésta con palabras soeces les decía que él no era ningún perro para que lo embolsaran.
Pero la situación se tornó tensa cuando sacaron el cuerpo de Trujillo Sandoval en la bandeja y envuelto en bolsas blancas, los llantos de sus seres queridos se combinaron con los gritos de la fémina que intentó tocarlo y a quien retiraron a la fuerza.
El CTI trasladó el cuerpo de ‘Huguito’ hasta las instalaciones de Medicina Legal, donde hoy lo reclamarán para darle el último adiós.
Alertó. En medio del dolor, los amigos de ‘Huguito’ le decían a su padre que el lunes anterior, éste les dijo que se iba para Bogotá o Medellín, o que mejor se mataba.
24 años de edad, tenía Víctor Hugo Trujillo Sandoval.
