MARIQUITA. El Juzgado Primero Especializado luego de aceptar el preacuerdo entre la Fiscalía y Alba Lucía Arango Alvis, la condenó a pasar 10 años y siete meses por el delito de tortura agravada.
La fémina aceptó que entre julio y octubre de 2012, sometió a torturas y tratos degradantes a una adolescente de 17 años de edad.
Hechos. La joven llegó a la vivienda de Arango Alvis, recomendada por una tía para trabajar en el servicio doméstico.
La adolescente se internó en la casa de Esperanza Arcila Ospina, ya fallecida, quien vivía con Arango Alvis, en la calle Primera A, número 6-68 Callejón de la Hermita de Mariquita.
En el lugar se comprometió a hacer el aseo de la casa, lavar ropa y asear a los perros, por lo que recibiría comida, techo y 150 mil pesos mensuales.
Los padres de la adolescente intentaron comunicarse con ella en varias ocasiones, pero les decían que no estaba, porque se había ido a Honda con la patrona.
Rescate. El 30 de septiembre de ese año, los progenitores recibieron una llamada de uan persona que les indicó que su hija estaba mal de salud, era maltratada, torturada, humillada y al parecer abusada. Además, que no podía salir sola y permanecía encerrada bajo llave.
Por tal razón acudieron a la Comisaría de Familia de Falan, y desde allí adelantaron un operativo y rescataron a la chica, quien lucía demacrada, con evidencias de golpes, cicatrices en la cara, brazos, pecho y cuello, que fueron propinadas por Arango Galvis y su compañera permanente.
La joven contó que permaneció encerrada, vigilada todo el tiempo y la amenazaban con hacerle brujería y le daban comida en el plato de los animales.
Y le contó lo sucedido a la señora de la tienda, el único lugar a que podía salir.
Vejámenes
La víctima refirió que la compañera sentimental de la condenada, practicaba la brujería y leía el tabaco. La maltrataban con puños en la cara y cuerpo, le rayaron la cara, le cortaron el pelo con cuchillo, para tal fin la sentaron en una silla y le amarraron las manos, le chuzaron el pulgar con agujas y en una ocasión intentaron ahogarla con una bolsa plástica.