LÉRIDA. José Figueroa Díaz compareció ante el Juzgado Octavo de Control de Garantías señalado por los delitos de homicidio agravado y fabricación, tráfico o porte de armas de fuego.
La historia. Figueroa tuvo un altercado con Yesid Alejandro Gutiérrez la madrugada del sábado mientras departían al interior de una caseta en el corregimiento Delicias de Lérida.
Según expuso el ente acusador, el presunto homicida rompió una botella de vidrio y le hizo ‘lances’ a Gutiérrez, pero este último no respondió a la agresión.
Figueroa se retiró del establecimiento y minutos más tarde regresó con una escopeta ‘hechiza’ y en compañía de un hermano que presuntamente sería miembro activo del Ejercito Nacional, comenta la Fiscalía.
El agresor no escuchó las súplicas la comunidad y la familia de la víctima. Lo persiguió varios metros hasta que al parecer lo impactó por la espalda.
Llegó grave. Gutiérrez fue remitido a una institución médica de Lérida, pero ante la gravedad de sus heridas fue remitido al Hospital Federico Lleras. Según la historia médica que leyó la Fiscalía, el hombre ingresó con un paro cardiorespiratorio y múltiples heridas de bala. En esta institución se produjo el deceso del hombre de 23 años de edad.
Lo ‘guardaron’. Dos días después, el presunto asesino se presentó ante el comando de la Policía de Lérida, llevó el arma con la que habría cometido el crimen.
El Juzgado Octavo de Control de Garantías privó de su libertad a Figueroa con la imposición de medida de aseguramiento en establecimiento carcelario, toda vez que el sujeto representa un peligro para la sociedad y en este caso priman los intereses de la población rural.