IBAGUÉ. A escasos siete meses de la conmemoración de los 30 años de la tragedia de Armero y a pesar de todos los problemas que sufren las víctimas de la tragedia, hay un fantasma afectivo que ronda a 236 familias: Sus ‘niños perdidos’.
Ésta podría ser la razón más poderosa para que por segunda vez el Tolima esté en la agenda de un Santo Pontífice.
Visita del Papa. Aunque no hay fecha específica, la visita del Papa Francisco a Colombia es una realidad, según afirmó el Vaticano la semana pasada. “Sin embargo, hace muchos años estamos gestionando para que de venir la máxima autoridad Católica, pueda tener como prioridad su visita a Armero” le contó a Q`HUBO Francisco González, director de la ‘Fundación Armando Armero’, quien agregó que lo que “falta es formalizar la petición”.
La razón. El Papa Francisco, argentino y miembro de una familia de emigrantes italianos “le puede tocar mucho el tema de los ‘niños perdidos de Armero’ porque conoce de cerca este dolor. En su país tras el golpe de estado de 1976, muchos niños fueron robados como ‘botín de guerra’ e inscritos como hijos propios por los miembros de las fuerzas de represión, abandonados y vendidos” dijo González. Lo anterior se conoce mundialmente como las Abuelas de la Plaza de Mayo.
La Iglesia. “No sabemos la agenda ni el etinerario del Papa Francisco. La posibilidad de que venga a Armero podríamos ponerla en discusión en la Conferencia Episcopal que se llevará a cabo en julio próximo” puntualizó a Q´HUBO monseñor Orlando Roa Barbosa, Arzobispo auxiliar de la Arquidiócesis de Ibagué.
“El Papa es una figura política muy importante que le podría dar solución a éste tema humanitario tan delicado del que nadie se ha preocupado. Las familias que acogieron a los niños de Armero y que se quedaron calladas; es hora que los devuelvan”, expresó el Director de ‘Armando Armero’.
