IBAGUÉ. “Lo único que me queda por esperar es un milagro”: Esa fue la respuesta del defensa del Deportes Tolima, José Vicente Preciado, cuando se le preguntó por la lesión que presenta en una de sus rodillas, la cual lo tiene marginado del plantel principal desde hace hace varios meses.
La dura afirmación del lateral por izquierda se debe a que los médicos le diagnosticaron una artrosis crónica que, al parecer, no lo dejaría volver a participar en el fútbol profesional, toda vez que dicha enfermedad está haciendo que su cartílago derecho se desgaste con el pasar de los días.
“Los médicos no me han dado muchas esperanzas, pero bueno, yo sigo trabajando para intentar superar esta dura situación. Trato de mostrarme fuerte, pero sin embargo la tristeza es muy grande, sobre todo cuando veo en el estadio a mis compañeros jugando y luchando por el equipo”, indicó ‘Chente’.
José, quien llegó proveniente del Deportivo Pasto en el 2007 con Wílmer Díaz Lucumí, dice estar preocupado porque el contrato con el ‘Vinotinto y oro’ se le vence en junio de 2011, y no sabe qué pasará después de esa fecha.
“Soy consciente que la lesión en mi pierna derecha es grave, y que después de que mi contrato termine, me tendré que poner a hacer algo para sacar adelante a mi familia. Yo pongo todo en las manos del Señor. Si Jesús logró levantar a un paralítico, creo que depositando mi fe en Él puede llegar a hacer algo bueno por mi rodilla”, puntualizó Preciado.
RONAL RENGIFO ÁLVAREZ