IBAGUÉ. Muy conocido era Carlos Ernesto Mendoza Quintero por los comerciantes del sector de la carrera Primera entre calles 15 y 16 y Chapinero donde sus padres tienen un local de venta de zapatos. El hombre murió tras sufrir una caída desde un tercer piso.
Mendoza Quintero, de 43 años de edad, era ‘el niño de la casa’ con retardo mental.
Vivía con sus padres en un apartamento del Centro de la capital del Tolima, pero el martes a eso de las 11:00 de la noche, abrió la ventana donde acostumbraba a mirar a la calle.
A John Mendoza, hermano del fallecido, le contaron que ‘Carlitos’ lo vieron cuando salió por la ventana y cayó a la calzada subiendo de la carrera Primera.
Los parientes manifestaron que él no perdió el sentido, pero su cabeza impactó contra el andén.
Los que vieron, angustiados llamaron una ambulancia: “Él estaba vivo porque se levantó y se quejaba por el dolor”.
Fue llevado a la Unidad de Urgencias de la Clínica Tolima donde a los pocos minutos de haber ingresado le dijeron al hermano que había muerto.
Mendoza manifestó que lo sucedido con su pariente no fue un suicidio, como se dijo en otros medios.