IBAGUÉ. Brayan Felipe Amaya cumplió cinco años ayer y sus padres consideraron que el mejor regalo eran ofrecérselo a la Virgen del Carmen. Durante la misa su padre, Ermes Augusto Amaya, lo levantó en hombros para presentárselo a la Santa Patrona. Edna Rocío Marín, madre del chiquillo, indicó que la devoción que le ha fomentado al hijo se la transmitió su progenitora desde pequeña:
“Para nosotros ella es importante, es nuestra protectora. Nos ha concedido favores, me ha protegido de cosas malas porque mi mamá me ofreció a ella y también ha velado por su salud”, afirmó.
Como ellos, una gran cantidad de feligreses católicos acudió a la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen con el fin de pedir uno que otro favor o milagro, y de paso agradecer por guiarles el camino y librarlos de todo mal y peligro.
Los conductores de la capital tolimense también realizaron ayer en la madrugada la tradicional caravana, organizada por el Cuerpo de Bomberos de Ibagué, y anoche se tenía programada la procesión de la Virgen desde la Parroquia hasta la calle 25 y retorno al templo.
