IBAGUÉ. A un delantero lo miden por una sola cosa: Los goles. Por tal motivo, los arietes del Deportes Tolima fueron duramente criticados por la afición y el periodismo a finales del 2009 y principios del presente año, toda vez que las anotaciones eran conseguidas en la mayoría de ocasiones por los volantes y defensas.
Eso sí, como ‘no hay mal que dure 100 años, ni cuerpo que lo resista’, a los punteros ‘Pijaos’ se les afinó la puntería y se encuentran nuevamente de ‘romance’ con las redes rivales, especialmente el nariñense Franco Arizala y el antioqueño Wílder Medina.
El hombre de Magüí suma en este torneo seis goles: Tres que le marcó el domingo al Cortuluá (su primera tripleta como profesional), uno al América de Cali y dos al Atlético Huila, escuadra con la que cortó una racha negativa que traía desde el 30 de mayo de 2009 (Tolima 3-1 Caldas).
A su vez, el ‘paisa’, que vulneró en dos ocasiones la portería tulueña, venía de una serie de lesiones que no lo habían dejado desplegar todo su fútbol ofensivo, el cual le ha servido para acumular hasta el momento cuatro tantos.
“El buen momento de los delanteros es resultado del trabajo que ellos han tenido en los entrenamientos, donde se han esforzado al máximo por salir del bache en el que entraron, el cual es normal en el fútbol”, indicó ayer en la tarde el técnico Hernán Torres antes de empezar un ‘mini’ entrenamiento para el reacondicionamiento físico de sus pupilos, debido a que hoy preparará la nómina que enfrentará mañana al Real Cartagena en Ibagué.
RONAL RENGIFO ÁLVAREZ