IBAGUÉ. En los primeros 10 días de este mes, tres familias ibaguereñas han llorado a sus parientes que por diferentes razones han terminado con sus vidas. El último caso se presentó ayer en el barrio Brisas del Pedregal.
Los gritos de una mujer alertaron a algunos residentes de la manzana G. Provenían de la casa 1 donde vivía Andrés Pérez Rodríguez, quien fue encontrado por su hermana suspendido en el patio.
El pelao, estudiante de Lenguas extranjeras de la Universidad del Tolima, era un paciente psiquiátrico. Según el reporte de la Policía, tenía problemas de depresión.
Vecinos que vieron al muchacho el miércoles estaban asombrados por la noticia. Algunos comentaron que lo veían como un muchacho normal y aparentemente sin ningún problema.
Los primeros casos
El Primero de este mes, en el barrio Modelia primer sector, zona norte de Ibagué, Giovanni Trejo Acosta, de 17 años de edad, quien dejó un hijo, le puso punto final a su vida. Trejo Acosta fue encontrado sin vida en el patio.
El otro difunto fue seis días después en el barrio Álamos, donde Wilmer Andrés González Rojas, de 15 años de edad, fue hallado por su padre. Él pelao también fue hallado dentro de su casa.
Un día antes de la muerte de González, uniformados del Cuadrante 94 de la Policía Metropolitana de Ibagué, salvaron a Jhon Fredy Ortiz Gutiérrez, quien quiso lanzarse del Puente de La Variante. El hombre le dijo a los agentes que tenía problemas sentimentales y de dinero.
“Busquen ayuda”
Debido a los recientes casos de suicidios en Ibagué, las autoridades de la Salud del Municipio prendieron las alarmas. Q’HUBO consultó sobre el tema con Laura Henao, psicóloga de la Secretaría de Salud de Ibagué: “Hay mucha disfuncionalidad familiar, fallas en la comunicación y en algunos casos se presenta violencia intrafamiliar”, indicó.
Para la funcionaria, un evento en un determinado momento como una discusión, no lleva a la persona a quitarse la vida: “Es un proceso estructural de mucho antes. Puede ser que sea una persona que ha crecido con muchos vacíos afectivos y en un momento de dificultad no encuentra apoyo o un motivo para seguir viviendo y toma esa decisión”, afirmó.
La profesional, aseguró que una manera de evitarlo es que las personas tengan un gusto por algo como la música, el baile o un deporte: “Los muchachos deben buscar afinidades, personas con las que compartan las mismas cosas que les permita hacer grupos que los ayude a crecer”. Y agregó: “Es un llamado a los padres de familia para que no dejen que el televisor o el computador sean los que acompañen a sus hijos, hay que buscar otros espacios”, puntualizó.
