IBAGUÉ. Sobre las 9:42 de la mañana de ayer, Luis Blanco encendió su vehículo estacionado en la esquina de la carrera Segunda con calle Novena, pero una falla mecánica hizo que el automotor se incendiara, lo que provocó la reacción inmediata de los taxistas, conductores, comerciantes, funcionarios de la Alcaldía y transeúntes que ayudaron al comerciante a sofocar las llamas antes de que ganaran terreno.
Aún asustado por lo sucedido, Blanco dijo que había salido de su casa para hacer una diligencia, cuando se presentó la falla: “Gracias a Dios que la comunidad fue muy solidaria. Estuvieron al tanto, bajaron los extintores y me ayudaron a apagar el fuego. Creo que había una manguera rota de la gasolina y aparentemente eso provocó el incendio. Lo importante fue la colaboración de la gente. Donde no hubiera sido así, se habría incinerado totalmente”, refirió.
Arley Lozada, taxista que se encontraba en descanso de sus labores, vio cuando empezó a salir el humo: “La gente sacó los extintores, yo abrí el capó, y un compañero del taxi también trajo el extintor”, dijo. “El carro estaba prendido por debajo, se le regó la gasolina”, puntualizó.
Alejandro Ortiz, ex integrante del Cuerpo de Bomberos, quien actualmente trabaja en la Secretaría de Bienestar Social, se encontraba a la entrada de la Alcaldía cuando vio la situación y volvió a poner en práctica sus conocimientos bomberiles: “Lo que hice fue desactivar la batería, quitar el material que ayuda a que se propaguen las llamas y descargamos extintores”, concluyó.
