IBAGUÉ. Acostado en el piso sin camisa y con su cuerpo bañado en sangre permanecía Babynthon Díaz Díaz esperando su muerte la noche del sábado. No quería ser auxiliado y se tornó brusco cuando llegaron la Policía y los enfermeros a ayudarlo.
Desesperado buscando que su vida terminara, se levantaba y enfrentaba a los patrulleros y daba vueltas por la calle 24 con carrera Séptima, del barrio El Carmen. Luego regresaba a acostarse diciendo: “Me quiero morir, déjenme aquí”.
Su progenitora y los vecinos pedían ayuda pero nadie se atrevía a acercársele. Después de media hora, cuando Díaz Díaz se encontraba débil por la cantidad de sangre que había perdido, varios policías lograron agarrarlo de las piernas y los brazos para llevarlo al Hospital San Francisco.
Seis heridas en la espalda, otra en el tórax y una más en el abdomen recibió el hombre, al parecer, por su compañera sentimental, Leidy Johanna Valencia Guerra, quien fue detenida.
Todo habría iniciado en el local ‘Son y Sabor’, donde ocurrió la primera agresión. La mujer salió del lugar y el herido se fue detrás de ella aparentemente para agredirla, pero ella cogió una botella despicada y lo atacó nuevamente.
Esa habría sido la primera vez que Valencia Guerra reacciona ante las constantes agresiones a las que era sometida por parte de Díaz Díaz, según contó la defensa de la mujer en la diligencia pública realizada en la mañana de ayer en el Palacio de Justicia.
No olvide: Valencia Guerra no aceptó el delito de violencia intrafamiliar y fue dejada en libertad por el Juez Promiscuo Penal Municipal de Alvarado con función de Control de Garantías.