IBAGUÉ. Jhonatan Arango Ciro murió después de permanecer tres días en la Unidad de Cuidados Intensivos, UCI, de la Clínica Saludcoop donde ingresó con una dolencia estomacal por las cápsulas de cocaína que llevaba en su interior.
El sujeto fue detenido en el centro asistencial por agentes del Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, luego de verificar por medio de una radiografía que tenía en su estómago 27 cápsulas con el alcaloide.
En audiencia realizada en el centro asistencial, el Fiscal 21 Seccional de la Unidad de Reacción Inmediata le achacó cargos por tráfico de estupefacientes a Arango Ciro, quien no aceptó su presunta responsabilidad ante el Juez de Control de Garantías, que como medida preventiva, determinó enviarlo a la Cárcel de Picaleña tan pronto estuviera en mejores condiciones de salud.
A partir del miércoles, Arango Ciro, quedó bajo custodia de los guardias del Instituto Nacional Penitenciario, Inpec, que lo vigilaron en la Clínica.
El sábado en la noche y luego de varias cirugías, el estado de salud del hombre se complicó, al parecer por una infección ocasionada porque una de las cápsulas se reventó en su interior, lo que produjo que no le llegara sangre en algunos tejidos de sus órganos.
El secretario de Salud Municipal, Jaime Gómez, manifestó que sería el primer caso de muerte de un correo humano o ‘mula’ en Ibagué: “Esta sustancia la ingieren cubierta por los dedos de los guantes de látex, que se pueden romper por los jugos gástricos del estómago, va al torrente sanguíneo, y causa un paro cardíaco”, indicó el funcionario.
Según Gómez, lo que debe hacer una persona que afronta esta situación es llegar a tiempo a la institución médica, hacerse un lavado gástrico y aplicarse medicamentos porque la sustancia, “provoca unos dolores horribles, que los hace ir a la clínica. Por eso no pueden tomar ni comer nada”, dijo.
Y agregó: “No he escuchado, y no conozco a la primera persona que se haya salvado cuando se le rompe un dedo de esos en el estómago”, concluyó el secretario de Salud.
