IBAGUÉ. El representante cívico de la Comuna Ocho fue asesinado por dos sicarios cuando se encontraba en la calle que divide a los barrios Nueva Castilla y Protecho – Topacio, norte de Ibagué. Los homicidas habrían confundido a Jaime Céspedes Conde, con otro sujeto.
El occiso se movilizaba en una motocicleta en compañía de una mujer. Céspedes Conde iba a mirar una nevera porque trabajaba en la compra de chatarra.
El líder comunal Evelio Patiño recibió algunas versiones del crimen, entre ellas que uno de los asesinos le manifestó al ‘compinche’ que se habían equivocado de persona.
Los ‘gatilleros’ llegaron a pie donde estaba el líder ultimado. Uno le disparó en una pierna: “Él les manifestó que lo estaban confundiendo”, dijo Patiño.
Pese a lo que refirió el occiso, los dos sicarios, que portaban armas, le dispararon seis veces. Los homicidas escaparon por una zona boscosa que comunica con el Río Chipalo y el barrio Topacio.
Las personas trataron de auxiliar al vocero de la comunidad, pero no había nada qué hacer, porque los disparos fueron mortales.
Las patrullas de la Policía de la zona llegaron al sitio y luego el Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, para encargarse de la inspección técnica al cadáver.
Ayudaba a la comunidad
Evelio Patiño recordó que su amigo estuvo en algunas campañas políticas, pero su verdadero trabajo era por la comunidad de su barrio San Gelato, donde vivía con su hijo.
Patiño le pide a las autoridades que el crimen no quede impune:
“Esperamos que las autoridades ofrezcan recompensa, porque es preocupante”.
Otro de los conocidos del occiso era Diego Londoño, quien se refirió a su amigo como “un hombre trabajador que le gustaba la labor social. Además luchaba por el hijo”, concluyó.
