Archivo/Líbano
Redacción Q’hubo
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Cuatro años de detención domiciliaria, multa de 66 salarios mínimos legales vigentes, 80 meses de inhabilidad para ejercer funciones públicas, pérdida del empleo e inhabilidad para desempeñar cargos similares por un año le fueron impuestas a Olga Navarrete Parra, exfiscal seccional de Líbano, quien fue declarada culpable del delito de prevaricato por acción.
El 2 de agosto de 2011, la exfuncionaria solicitó la absolución perentoria de un investigador de la Dijin, investigado por exigir una suma de dinero a un hombre al que se acusaba de lesiones personales. El funcionario, quien actuaba como policía judicial fue capturado en flagrancia recibiendo el dinero, luego de que la víctima lo denunciara tras conocer en la Fiscalía que el caso fue archivado por desistimiento del agredido.
El ente acusador señaló que del hecho había material probatorio suficiente como videos, entrevistas a los agentes captores y a la víctima, lo cual Navarrete pasó por alto “llevando a cabo a cabo un análisis sesgado y caprichoso de las pruebas incorporadas en el juicio, orientado exclusivamente a favorecer al procesado”. En febrero del presente año, el Tribunal Superior de Ibagué absolvió a la mujer en primera instancia, pero una decisión de la Corte Suprema de Justicia tumbó esa decisión, concediendo la razón a la Fiscalía y condenando a la exfiscal.
