IBAGUÉ. Lo que sería un tratamiento normal y un servicio como cualquier otro, se ha convertido en un problema para la estilista Yisel Edith Vásquez Ramos, quien dice haber sufrido insultos y agresión física por un suboficial de la Policía y su compañera sentimental. Vásquez Ramos le hizo un servicio a una amiga y el trabajo le gustó a la compañera del policía quien le pidió a la estilista que le hiciera un domicilio para un tratamiento de decoloración: “Le hice unas preguntas antes de hacer el procedimiento y me respondió que no tenía nada, por lo que estaba apta para el tratamiento”, manifestó.
Luego de terminar el procedimiento Vásquez descubrió que la cliente le había mentido en algunas de las respuestas que le formuló, debido a que el proceso arrojó otros resultados en el color del cabello: “Le hice las recomendaciones que debía tener”, contó la afectada.
A los cuatro días la estilista recibió una llamada de la mujer a quien le hizo el procedimiento y dijo que se le había caído el cabello: “Le ofrecí el apoyo y la asesoría, pero no me dejó hablar”, contó.
De acuerdo con el relato de la afectada, pasados unos días el policía fue con la esposa: “Se presentó cordialmente pero me amenazó porque eso era lesiones personales y que él era de la Sijín. En ese momento ella me agredió verbalmente”, manifestó.
La estilista le envió 50 mil pesos a la mujer ya que ella me dijo que tenía que darle lo que había gastado en el arreglo del cabello. Además, Vásquez había quedado de enviarle otros 33 mil pesos.
La agresión
El uniformado llegó en una patrulla con la esposa y según Vásquez le gritaban groserías, le dijeron a la mujer que no querían 50 ni 85 mil pesos, sino 2 millones 500 mil pesos, porque eso eran lesiones personales.
“Cogí un taxi y me dirigía a la casa de mi amiga que vive en el barrio San Lucas, en el camino el policía adelantó el taxi en forma brusca y se ubicó delante de este y se bajó con la señora”, expresó, Vásquez que estaba asustada.
El suboficial habría agarrado con una mano el cuello de Vásquez, ella refirió que el servidor público tenía en la otra mano un objeto duro, pero ella no pudo establecer qué era.
Los minutos pasaron y el hombre insultó a la agredida y le gritó que con ellos nadie se metía y que quería la plata.
Además le expresó que la iba a matar. La esposa del policía intervino para que soltara a Vásquez.
Ya están investigando
El comandante de la Policía Metropolitana de Ibagué, coronel Fernando Murillo Orrego, dijo: “Recibimos la queja y ya se está adelantando la investigación disciplinaria que tiene que ver con el tema “, indicó.
Debido al temor que la mujer siente ante la situación, el oficial añadió: “No vamos a permitir que un funcionario de la Policía utilice la investidura para intimidar a un ciudadano del común, por eso le ofrecemos todas las garantías”, puntualizó.
