Margarita María Londoño, qhuboibague@gmail.com
Según (Ballesteros, 1999) la memoria es un proceso psicológico que sirve para almacenar información codificada. Dicha información puede ser recuperada, unas veces de forma voluntaria y consciente y otras de manera involuntaria.
Para cualquier ser humano, la memoria es su capacidad para almacenar experiencias y poder beneficiarse de ellas en su actuación futura; se define a este proceso mental como la capacidad para retener y hacer un uso secundario de una experiencia, basándose en las acciones del sistema nervioso y, en particular, del cerebro.
Además (Fombuena, 2013), afirma que sus posibilidades corresponden al desarrollo del último de aquí, la relevante importancia de la memoria en el hombre, y permite retener lengua materna y otras lenguas que pueda haber aprendido; mantener hábitos, habilidades motoras, conocimiento del mundo, de seres queridos y odiados, y referir a ellos durante la vida. Cualquier comportamiento humano está en realidad potenciado más por patrones adquiridos, que por estímulos inmediatos resultantes de la situación real.
Todos los procesos mentales deben estar en constante práctica, siendo ejercitados para tomar la fuerza necesaria capaz de ejecutar un proceso sano que garantice el funcionamiento adecuado.
La codificación, el almacenamiento y recuperación de la información pertenece al proceso cognitivo llamado memoria, el que permite recordar con claridad las ideas, hechos, acontecimientos, palabras, conceptos, sensaciones, personas, etcétera.
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Los recuerdos
Los individuos por lo general experimentan diversos estímulos que se convierten en recuerdos significativos en el transcurrir de su existencia, cada uno de los recuerdos que tenemos registrados en la mente han sido gracias al aprendizaje y la experiencia, esas capacidades que nos ayuda a adaptarnos en distintos contextos bajo diferentes situaciones. La función cerebral de la memoria busca recuperar en un momento dado lo que se necesite, lo cual hace pensar en toda la información que se ha adquirido tiempo atrás a través de los sentidos (audición, tacto, gusto, olfato y visión).
El cerebro es capaz de almacenar gran cantidad de información y la memoria juega un papel súper importante en la orientación que se le da a la vida desde el pasado hasta el presente y en la proyección futura. A medida en que vamos envejeciendo, la mente sufre una serie de cambios y la memoria se ve afectada. Conforme van pasando los años, el deterioro es evidente, entonces la persona tiende a desubicarse, a tal medida que puede llegar a perder por completo ese proceso cognitivo.
Hay muchas investigaciones que relacionan la memoria con el estilo de vida, aunque existen bastantes más factores relacionados con su deterioro. No se puede asegurar en ningún momento que sea un solo factor específico, incluso se tiende demasiado a confundir la falta de atención y concentración con el poder recordar algo, dos puntos distintos que deben de ser previamente examinados a profundidad para tener la certeza de que los síntomas que presente alguien, sean directamente asociados a la ausencia de memoria y no a falta de atención o concentración.
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5 procesos esenciales de la memoria:
1. Fuente de la información: estímulo y experiencia.
2. Codificación de la información: consolidación y aprendizaje.
3. Almacenamiento de la información: huella y engrama.
4. Recuperación de la información: recuerdo y reconocimiento.
5. Eliminación de la información: olvido.
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17 maneras de mejorar la memoria:
1- Duerme bien.
2- Ten una rutina de ejercicios físicos.
3- Aliméntate sanamente.
4- Trata de estar mentalmente activo.
5- Organízate con tus actividades diarias.
6- Toma tiempo para descansar.
7- Socializa con las demás personas.
8- Controla tus emociones.
9- Realiza juegos de palabras.
10- Experimenta cosas nuevas y divertidas.
11- Lee un libro o artículos de interés.
12- Mantén tu entorno ordenado.
13- Toma apuntes.
14- Escucha y mira contenido cultural.
15- Permite que tu imaginación vuele un poco de forma positiva.
16- Revisa fotos y videos.
17- Practica la relajación.
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Tipos de memoria humana:
MEMORIA SENSORIAL:
se percibe por medio de los sentidos (imágenes, sabores, olores y sonidos) correspondiendo a los estímulos externos, esta tiene corta duración y nos ayuda bastante con la orientación en el momento de leer un libro, llevar la secuencia de un programa de televisión o sostener cualquier conversación.
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MEMORIA A CORTO PLAZO:
Tiene una capacidad limitada de 30 a 40 segundos en cuanto a la retención de la información, ayuda en la parte operativa o de trabajo porque permite la reflexión, el razonamiento y el aprendizaje. Se utiliza para analizar lo que está sucediendo para comprenderlo y poder reaccionar adecuadamente.
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MEMORIA A LARGO PLAZO:
puede durar largos periodos, incluso años. No tiene límite de tiempo, ayuda a recordar hechos, sucesos, situaciones, personas, cultura, creencias, pensamientos, habilidades y destrezas.
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