REDACCIÓN Q’HUBO qhuboibague@gmail.com
Vendedores informales de la ‘Calle Bonita’, ubicada entre las carreras Segunda y Tercera del Centro de Ibagué, organizaron una ‘olla comunitaria’ ayer en la tarde en la carrera Tercera con calle 14. Según ellos, algunos de sus compañeros desde hace cinco días no han podido trabajar por el cierre de una bodega.
Durante la instalación de la olla, la hornilla y la leña, hubo una refriega entre algunos vendedores y policías de la Metib, cuya labora es manetener despejada la carrera Tercera de vendedores ambulantes como parte del plan de la Alcaldía para recuperar esta importante vía.
Los uniformados llegaron al sitio para imponer comparendos a quienes lideraban la iniciativa, les pidieron que apagaran el fogón y retiraran la olla. Hasta un abogado y político intervino en favor de los comerciantes informales y dialogó con los policías. Finalmente, al sitio llegó un Mayor de la Metib que calmó la situación y terminaron de cocinar el sancocho.
Cierre de bodega
Jenifer Andrea Jiménez, una vendedora de ropa, veedora de espacio público y representante juvenil de los trabajadores informales, aseguró que, “se determina hacer una ‘olla comunitaria’ en solidaridad de las personas que fueron afectadas por el sellamiento de una bodega donde vendedores informales guardaban sus mercancías. “Son cerca de 50 familias que se ven afectadas y que llevan cinco días sin trabajar”, aseguró la mujer.
Según la joven, desde que se anunció el plan de recuperación del espacio público en la carrera Tercera, habían concertado con la Administración municipal y determinaron que los compañeros iban a ocupar de nuevo los puestos, pero sin invadir la carrera Tercera. El objetivo de la regulación ejercida tanto por la Administración municipal como por los vendedores ambulantes, es ver bonita la carrera Tercera y hacerlo en paz.
“Oh sorpresa, cierran la bodega. Es como cuando le dicen que hay cese al fuego y el primero que acciona un arma se acaba esa confianza que hay”, dijo Jenifer Andrea. Y precisó, que la bodega es utilizada para descargar mercancía y el propietario tiene un parqueadero en donde se encarga de guardarle la mercancía a los vendedores informales.
Al parecer, el cierre se generó “porque el señor propicia las ventas informales al guardar las mercancías. Entonces nosotros lo vemos como un golpe contundente”, dijo la joven. Por último, indicó que el sancocho fue preparado para los vendedores informales que no han podido trabajar, ni comer, ni llevarle algo a sus familias en los hogares.