REDACCIÓN Q’HUBO qhuboibague@gmail.com
Una fuga de agua del acueducto en la calle 24 con carrera Cuarta Sur, vía que divide al sector de El Arado con Las Ferias, lleva más de un mes. El preciado líquido fluye de manera incesante por la calle, sin que se haya hecho nada hasta el momento para reparar el daño. La vía ya presenta averías y una vecina del lugar se quedó sin suministro de agua potable por cuenta de el daño.
Agua corre sin cesar
La calle 24 es una fuente constante. El desperdicio de agua es incontrolable. El líquido emana de entre el pavimento y corre hasta un canal que pasa a solo una cuadra del lugar. La situación es preocupante, pues por esta calzada circulan todo tipo de vehículos, pero la avería ya ha deteriorado el pavimento y hay quienes temen que se repita un episodio como el del camión de basura que se hundió en la Guabinal con 19.
“Cada rato vienen los del Ibal, toman videos, fotos y se van. Necesitamos que se acuerden de esta calle”, aseguró un vecino de la cuadra.
Pero el daño interno al parecer es más grave que una simple fuga y tiene a una residente del sector desde hace una semana sin servicio de agua, aunque irónicamente a unos metros de la entrada de su vivienda, esta se desperdicia.
Se trata de Luz Dary Valencia, quien reside justo al frente del lugar donde está la fuente incesante de líquido del acueducto. La ciudadana asegura que en su casa han llamado en repetidas ocasiones al Ibal para reportar el daño y solicitar el arreglo, pues durante una semana ha tenido que molestar a los vecinos para abastecerse del preciado líquido, preparar los alimentos y hacer aseo.
“Al parecer esa intersección de la tubería colapsó. Llamamos al Ibal y nos dijeron que hiciéramos nosotros mismos el arreglo. Eso no tiene sentido, pues después nos podemos ganar un problema legal. Dicen que como hay tantos daños en la ciudad, no tienen el personal para atender este daño”, contó doña Luz Dary.
Mientras tanto, ella y los habitantes de toda la cuadra seguirán esperando a que los funcionarios competentes cuenten con el tiempo y la disponibilidad operativa para darle solución a esta problemática.
La cereza del pastel
En esa misma vía, unos cuantos metros abajo, poco antes del puente sobre el canal de aguas lluvia, una alcantarilla se quedó sin su respectiva tapa. El peligro es enorme en especial para peatones y motociclistas, quienes corren el riesgo de caer en lo profundo del pozo de aguas residuales. Por esta razón, la comunidad improvisó una señalización con un colchón que alerta a los transeúntes sobre el peligro.