En ellas se puede deleitar con lo mejor de la gastronomía popular.
A las plazas de mercado la 21 y la 28, a diario acuden comerciantes y familias para abastecer sus negocios y hogares con alimentos frescos. Además de facilitar ese intercambio comercial, le permite a sus visitantes disfrutar lo mejor de la gastronomía popular de Ibagué. Q’HUBO visitó cuatro lugares en los que se pueden degustar algunos platos representativos.
Plaza de mercado La 21
La 21 fue inaugurada en 1959 y en la actualidad cumple las funciones de una central de abastos en la que se comercializa la mayoría de alimentos que se consume en la ciudad y donde, además, hay restaurantes y puntos de venta de algunos platos típicos del Tolima.
Envueltos y amasijos de doña Concha
Héctor Rayo atiende el puesto de envueltos y amasijos de doña Concha en la plaza la 21. Fotos: Hélmer Parra/ Q’Hubo.
En la 21 hay un espacio destinado para los comerciantes de productos tradicionales del Departamento como los bizcochos de cuajada, achiras, mantecos, rosquetes, almojábanas, bizcochuelos, arepas de maíz pelado; bolas de chucula y chocolate sin dulce; queso asado, miel de abejas, mielmesabe, arequipe; insulsos de maduro y de maíz; subidos, entre otros.
Uno de estos negocios es el de la señora María, a quien sus clientes conocieron durante más de 60 años como doña Concha, una mujer oriunda del Sur del Tolima, quien se puede considerar como una de las fundadoras de la plaza porque llegó a este lugar cuando fue inaugurado a mediados de 1959.
A raíz de la pandemia, la señora Concha cerró su negocio a principios de 2020, cuando comenzó el confinamiento y desde esa época no pudo regresar a la plaza debido a que se enfermó estando en la casa. Sin embargo, su nieto Héctor Rayo se hizo cargo del punto de venta luego de estar cerrado por casi dos años y en la actualidad es quien abre todas las mañanas en los puestos 666 y 667. Para efectuar algún pedido, puede comunicarse al 3146709198.
Tamales y lechona de doña Hermelinda
Los platos más apetecidos por ibaguereños y turistas que visitan esta plaza son los tamales, la lechona y el popular tamal con copete, que se consigue en varios locales, entre esos, el de Hermelinda Cumbe Andrade, una mujer de 75 años, oriunda de la vereda Buena Vista de Coyaima. Ella heredó la tradición culinaria de su familia a los 18 años, llegó a Ibagué en 1958 y se convirtió en una de las fundadoras de la plaza la 21.
Recuerda que al principio vendía sus productos en la estación del tren, en la plaza de los Burros y en Bogotá, hasta que en 1959 se ubicó en uno de los puestos recién construidos de la 21, inaugurada a mediados de ese año. La señora Hermelinda es una de las comerciantes que junto a su familia han deleitado a miles de comensales durante más de seis décadas con la lechona y los tamales que preparan en la lechonería La Deliciosa de Coyaima, ubicada en la avenida 37 N°. 4B – 26 del barrio Nacional, muy cerca del hospital Federico Lleras Acosta y vende sus productos en el puesto 675 de la plaza.
En la actualidad, el puesto de doña Hermelinda es atendido por su hija Angelica Sánchez Cumbe. Allí se puede adquirir lechona desde $12 mil pesos, tamal con copete a $10 mil, tamal con arepa a $7 mil y morcillas a mil pesos la unidad. Si desea hacer sus pedidos, puede comunicarse a los teléfonos 3123324735 o al 3183971994.
Plaza de mercado La 28
La 28 se inauguró en 1963 y fue la tercera plaza de mercado de Ibagué. Su costo fue de un millón de pesos y en un principio sirvió para albergar comerciantes que abastecían de víveres a 50 mil habitantes de 10 barrios. En la actualidad, además del comercio de frutas y verduras, funciona como el principal mercado mayorista de pescado y productos de mar de Ibagué y también tiene una zona de comidas típicas.
Avena La Abuela
Jackeline González atiende a diario a decenas de clientes que se acercan hasta el local 082 de la plaza la 28 a degustar la avena, los buñuelos, almojábanas, pan de yucas, pan de queso, empanadas, marranitas y pasteles de yuca que vende de lunes a viernes de 6 a.m. a 6 p.m., y los domingos y festivos de 6 a.m. a 3 p.m.
Este negocio lo heredó de su señora madre, Belarmina Mora, quien en la actualidad tiene 88 años y abrió este punto de venta hace más de cinco décadas, poco tiempo después de haberse fundado la plaza de mercado. Desde esa época ganó reconocimiento entre propios y turistas debido al sabor de la avena y a la frescura de sus productos.
Jackeline es la actual administradora del negocio y atiende con la ayuda de varios empleados que se encargan de atraer clientes en la esquina de la plaza. Además de vender la avena en vaso, también la distribuye en diferentes presentaciones, de uno hasta cinco litros.
Los caldos de doña Eunice
Hace 52 años, la señora Margarita Guzmán llegó a la plaza de la 28 y montó un restaurante de comida tradicional en el que se dio a conocer por su sazón y, en especial, por la chanfaina de cerdo y los caldos de claros que preparaba. Un tiempo después, su nieta, la señora María Eunice Palacio, llegó de Lérida a trabajar en dicho lugar y permaneció allí como empleada hasta que su abuela se retiró y le vendió el restaurante.
Desde esa época, la señora Eunice ganó reconocimiento entre sus comensales debido a que sirve uno de los mejores caldos de bagre de la ciudad, además del de bocachico, capaz, pajarilla y costilla; o el bagre en salsa, la lengua en salsa, carne sudada, entre otros platos de la gastronomía popular.
Recuerda que a su restaurante han ido alcaldes, gobernadores, empresarios y otras personalidades a degustar sus desayunos, que van desde los $10 mil hasta los $14 mil pesos, acompañados de patacones, arepa y sobremesa, y en una cantidad suficiente para quedar satisfecho y bien alimentado.
Tome nota
Los edificios donde funcionan las plazas de mercado La 21 y La 28, hacen parte de los 33 Bienes de Interés Cultural, BIC, con los que cuenta Ibagué, por lo que están protegidos por la Ley 1185 de 2008, que busca salvaguardar su valor cultural e histórico.