El accidente sucedió en la avenida Ambalá, cerca del Copiclub.
REDACCIÓN Q’HUBO
La vida de Carlos Fernando Vargas Charry se apagó al caer la tarde del jueves. Sufrió un fatal accidente de tránsito en la carrera 14, N° 132 – 41 de la vía a El Salado, a pocos metros del Copiclub y la entrada de Coopemtol, en medio de la lluvia que a esa hora caía sobre ‘La Musical’.
Murió en la vía
Se conoció que Carlos Fernando, quien contaba con 19 años, se movilizaba en su motocicleta, una Pulsar NS 200, de placa XFO 28E. En medio de la lluvia, el joven bajaba por la avenida Ambalá y estaba a pocas cuadras de su casa. Residía en el Conjunto Ibanasca.
En los videos de varias cámaras de seguridad, a los que Q’HUBO tuvo acceso, se observa cuando Carlos Fernando intentó adelantar una buseta, pero la moto saltó, al parecer por una prominencia sobre el asfalto, y perdió el control del automotor. Luego resbaló y cayó. Como iba al lado de la buseta, esta le pasó por encima y falleció en el lugar.
La buseta está adscrita a Expreso Ibagué y su placa es WTO 029, con número interno EI 0606. Era conducida por José Mario Rojas Molano. Iba bajando por la misma vía con destino al barrio El País. El conductor detuvo el vehículo de servicio público unos metros adelante, mientras la motocicleta y el cuerpo del ‘motero’ quedaron en la mitad de la calzada.
Varias personas que se acercaron al joven, indicaron que la buseta con una de sus llantas alcanzó la cabeza de Carlos Fernando, cuyo cuerpo fue tapado con un plástico azul.
La inspección
Luego de ocurrido el accidente, al sitio llegaron los agentes azules de la Secretaría de la Movilidad, quienes tardaron más de una hora en hacer presencia y con su personal de criminalística efectuaron la inspección técnica al cadáver.
Según la hipótesis que manejan las autoridades, el siniestro vial sucedió por el tránsito entre carriles, al parecer por parte del motociclista.
Llegó la familia
Luego de que divulgaran el fatal accidente a través de las redes sociales, al sitio llegaron amigos y familiares de Carlos Fernando, entre ellos su progenitora, quien expresó su profundo dolor por la pérdida de su hijo.
Se trató de una escena de dolor, desgarradora. La señora pasó la cinta de acordonamiento, lloró y gritó al reconocer a su hijo, luego se desmayó. Fue auxiliada por personas que estaban en el lugar.
TOME NOTA
Habitantes del sector, a través de una emisora local, culparon del accidente a un hueco que fue intervenido y al parecer no se tapó a tiempo.