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La remota ciudad de Puerto Varas en la región Los Lagos, al sur de Chile, ya cuenta en sus calles y espacios públicos con varias esculturas realizadas por un tolimense. Se trata del escultor Camilo Guerrero, oriundo de Líbano, quien se radicó hace tres años allí y se ha convertido en un referente de intervención artística con sus piezas, llenas de significado.
Del Líbano para Chile
Las obras del artista libanense Camilo Guerrero han tomado gran importancia para la región Los Lagos en Chile. Una de ellas se erige frente al lago Llanquihue, en Puerto Varas. La escultura en ferro cemento denominada ‘Amor de un viaje’ con la figura de una mujer ancestral y un barquito en su cabeza hace referencia a la necesidad de frenar la contaminación del lago que baña a la ciudad.
Otra famosa escultura del tolimense es ‘Armonía’, figura de seis metros de altura tallada en el tronco de un pino oregón que iba a ser talado por el municipio. Sin embargo, la comunidad del barrio Mirador de Philip rescató el tronco y encargó una escultura al maestro en Artes Plásticas, quien presentó tres propuestas. Los lugareños eligieron ‘Armonía’, que representa a los seres que habitan en respeto por la naturaleza.
Sobre el hecho, Camilo expresó su alegría y esperanza “al ver una comunidad que resuelve un problema a través del arte”.
En la cercana ciudad de Puerto Montt, sobre el frontis del hospital regional, está ubicada una de sus obras en memoria de las víctimas del Covid-19 y en homenaje al personal de la salud. El monumento alude a la vulnerabilidad como fortaleza.
El arte fue su camino
Desde niño, Camilo Guerrero tuvo contacto con el arte en su natal Líbano en una época que recuerda con alegría. Después del colegio, asistía a clases de danza, teatro, música y pintura. Pero cuando llegaron al municipio dos maestros de escultura ibaguereños, encontró en esa expresión artística una forma especial de comunicarse.
Sus primeras esculturas las realizó a los 11 años, y aunque tuvo la posibilidad de prepararse como músico de saxofón en el Conservatorio del Tolima, eligió irse a Bogotá con 16 años para estudiar Artes Plásticas en la Universidad Nacional.
El escultor hizo parte durante seis años de un megaproyecto llamado el Yoga Planetario, primer templo hindú en Colombia en el que esculpió gran cantidad de figuras sagradas de esa religión oriental. En esa época conoció a su actual esposa de origen chileno y en 2019 se radicó junto a ella en el país del sur. Actualmente su arte contribuye al desarrollo social de poblados ubicados en paisajes fríos y lacustres, rodeados de grandes volcanes.
Para el desarrollo de esta nota, Q’Hubo consultó medios escritos chilenos y un capítulo del programa Nuestra Cultura TV de Pijao Editores.
DATO
En su Instagram, @camiloguerrero.art, el escultor tolimense comparte detalles de los procesos de realización de sus obras.
