Hombre quien tiene a su esposa postrada en cama: “el Estado y las EPS nos abandonaron”

Hace tres años, Álvaro Bonilla tomó la decisión de llevarse a su esposa para la casa. Según dijo, la EPS no ha cumplido una acción de tutela. Fotos Q’HUBO y suministradas.

REDACCIÓN Q’HUBO qhuboibague@gmail.com

Con sus propios medios, según su testimonio, Álvaro Bonilla convirtió una habitación de su vivienda en lo más parecido a una unidad de cuidados intensivos. Todo para velar por el bienestar de su compañera de vida y madre de sus dos niños, Erika Alexandra Triana Gómez, que en 2018 quedó postrada en cama. 

De acuerdo con el testimonio de Álvaro, de nacionalidad española, las EPS y el Gobierno lo han dejado solo. Le tocó alquilar un ventilador, un monitor de signos vitales y por su propia cuenta recargar la bala de oxígeno. También, de su bolsillo, paga una auxiliar de enfermería que le ayude a cuidar y atender a Erika, y comprar todos los insumos que ella requiere.  

En diálogo con Q’HUBO, don Álvaro recordó que aunque en marzo de 2020 un Juez de la República amparó los derechos de la ciudadana a través de una acción de tutela, las entidades prestadoras de salud “no han cumplido”. 

Cuando Erika salió del hospital, pesaba menos de 20 kilos. Hoy pesa 40.

Para la casa

“En el año 2019 tomé la decisión de sacarla de una unidad de cuidados intensivos porque estaba pesando 30 kilos. Estaba en los huesos y un médico me dijo: si quiere que siga con vida, es mejor que se la lleve”, dijo. 

Con ayuda de conocidos, empezó a buscar dónde le podrían alquilar los equipos necesarios y encontró. Durante un buen tiempo, pagó más de tres millones de pesos mensuales por el alquiler del ventilador, que representa los pulmones de Erika. 

“Con tanto gasto, llegó el día en que no pude pagar el alquiler y la empresa intentó quitarme el equipo, pero un abogado nos ayudó y paró la decisión porque está en riesgo la vida de ella”, indicó. 

En palabras del señor,  luego de una reunión con diferentes entidades, durante abril y mayo Salud Total le prestó algunos servicios, pero en junio se enteró que dicha EPS no le iba a seguir prestando el servicio de salud a la paciente, al parecer por ser de alto costo. 

Así las cosas, Erika terminó afiliada a la Nueva EPS. “Según Salud Total, yo solicité el cambio de EPS, pero eso no fue así. El 2 de mayo llegamos a unos acuerdos y 28 días después la dejaron en completo abandono. En los últimos meses ella ha bajado más de 15 kilos debido a una infección que adquirió por demora en el cambio del botón de la gastrostomía. Duré seis meses gestionando el cambio ante la EPS”, puntualizó. 

La salud de Erika empezó a deteriorarse en 2013, cuando tenía 26 años de edad.

El diagnóstico

Hace 10 años, Erika Alexandra Triana Gómez, empezó a perder fuerza en sus manos. Poco a poco su estado de salud se fue deteriorando y en 2014 los médicos le diagnosticaron Esclerosis Lateral Amiotrófica, Ela, una enfermedad progresiva del sistema nervioso que afecta las células nerviosas en el cerebro y la médula espinal, y causa pérdida del control muscular. Hace cuatro años su cuerpo quedó postrado en cama. No puede hablar, tiene traqueostomía, gastrostomía, debe usar pañal y depende de un ventilador respiratorio. No obstante, su mente está tan lúcida que creó una manera de comunicarse con su esposo e hijos y personas que la atienden. 

“Yo la he llevado donde especialistas particulares y luego de un examen, ellos le descartaron el Ela, me han dicho que puede tener una neuropatía. De acuerdo con el concepto, si la EPS cumpliera con las terapias y toda la atención necesaria, ella ya se hubiera recuperado y quizás ya no necesitaría el ventilador.  Hasta el presidente Iván Duque conoce el caso. Esperamos que el nuevo Gobierno nos ampare”, advirtió Álvaro Murillo.

La cifra

34 años tiene Erika Triana. Su esposo e hijos, menores de edad, hacen de enfermeros. 

Noticias Recientes

Suscríbete

Recibe contenido diario con nuestra suscripción mensual.

Danos tu opinión