Integrantes de la familia Idarraga, quienes residen desde hace 55 años en la carrera Primera con calle 11 de Ibagué, en cercanías al parque de la Música, le contaron a Q’Hubo que están afectados por la caída de una pared de la casa de enseguida, esto debido a que dicha propiedad está abandonada hace varios años y ahora, sin muro, lo más probable es que los habitantes de calle que frecuentan la zona, terminen por invadir dicho predio para saquear algunos elementos como tejas, puertas y unidades sanitarias, y posiblemente, también ingresarán a su propiedad.
A esto se suma que como dueños de la vivienda, no han podido vender, construir o hacer mejoras en dicho terreno debido a que, según ellos, el Plan de Ordenamiento Territorial no lo permite por encontrarse en una zona que está en riesgo de remoción en masa.
La denuncia
Aproximadamente a las siete de la noche del sábado 21 de mayo, colapsó el muro lateral de una antigua vivienda abandonada, ubicada en la carrera Primera No. 10 – 30, diagonal al parque de la Música. La caída de esta pared tiene preocupados a los residentes de las casas aledañas debido a que en la parte trasera hay una zona verde en la cual funciona una olla de microtráfico que a diario frecuentan decenas de delincuentes y habitantes de calle.
En una visita que la Inspección No. 1 de Policía de Ibagué llevó a cabo hace varios días a la vivienda de la familia Idarraga, advirtieron que era necesario que los propietarios del predio contiguo que está abandonado, se acercaran a dicha dependencia para iniciar una intervención de emergencia por amenaza de ruina, sin embargo, se desconoce si dicho trámite ya está avanzando, puesto que les dijeron que era necesario hablar con la inspectora de Policía y posteriormente hacer la solicitud a la Secretaría de Gobierno de Ibagué para que dicha dependencia envíe a un funcionario a revisar el problema.
“Aquí nunca hemos tenido un deslizamiento y tampoco ha venido un geólogo a hacer estudio de suelos y a decirnos que el terreno no sirve, por lo que no sabemos de dónde salió el concepto. Lo que sí sabemos es que hace unos años un concejal vino a pedirnos que si lo vendíamos”, expresó Sandra Idarraga, quien reside en la vivienda afectada.
Los habitantes de la casa manifiestan que ya tienen información sobre la intención de algunas personas que frecuentan la zona verde aledaña al parque de la música, de ingresar a la casa abandonada para sustraer tejas, canales de aguas lluvias, puertas, entre otros elementos que luego comercializan en chatarrerías. Debido a esta situación, la familia XXX manifestó que no pueden cuidar la casa contigua y estar pendiente de que no se metan los ladrones a ese predio y a los demás, por lo que piden que los propietarios se hagan cargo de la reparación del muro que se cayó.
Zona insegura
La zona verde aledaña al parque de la Música y al Conservatorio del Tolima, que colinda con el barrio Baltazar y Combeima, durante varios años ha sido insegura para transeúntes y residentes del sector, esto debido a la presencia permanente de habitantes de calle y delincuentes comunes que acuden allí a comprar y consumir alucinógenos o a esconderse después de cometer hurtos en el centro de la ciudad. De igual manera, algunos vendedores ambulantes usan este espacio para hacer sus necesidades fisiológicas debido a la ausencia de baños públicos.
A raíz de este panorama, algunos habitantes de predios ubicados en la carrera Primera, entre calles 10 y 12, coinciden en la necesidad de que la Alcaldía lleve a cabo una transformación real del sector, esto teniendo en cuenta que dicha zona es una de las tres Áreas de Desarrollo Naranja (ADN) que existen en la ciudad y cuyo objetivo es, según la Secretaría de Cultura, convertir el centro de Ibagué en un eje de desarrollo cultural, económico y social, sustentado en el potencial de las actividades culturales y creativas presentes en este espacio.
DATO
La demolición de la antigua casa en la que colapsó el muro, puede llegar a costar hasta $40 millones de pesos.
