REDACCIÓN Q’HUBO/qhuboibague@gmail.com
Hace siete años, Merly Pulido y su mamá dejaron la fría Bogotá y se radicaron en Ibagué. Por recomendación médica, les tocó buscar una ciudad más cálida. En principio se dedicaron a fabricar empanadas, pero como el negocio no les dio para pagar arriendo, decidieron invadir un lote en el asentamiento Ecoparaíso.
El lunes en la madrugada, un derrumbe casi les arrebata la vida a ellas y a los dos niños de Merly, de dos y cinco años.
La muchacha, que además padece una discapacidad auditiva, le hace un llamado a la Alcaldía para que le ayude a tener un techo digno y seguro.
En diálogo con Q‘HUBO, Merly recordó que recién llegaron a la ciudad, ella también recorría las calles de ‘La Musical’ vendiendo empanadas. No obstante, cuando se casó y quedó en gestación, dejó de hacerlo pues el cuidado de los niños le toma tiempo.
Ante la situación, su mamá decidió emprender vendiendo ensaladas de verduras por las calles, un negocio muy común en Bogotá.
“Nacieron los niños y ya no pude salir a vender, sin embargo, yo le ayudo a mi madre a picar las verduras y empacarlas. Todos los días mi mamá sale a caminar con su canasto y gana entre 20 mil y 30 mil pesos”, dijo.
Aunque Merly encontró un hombre responsable, las oportunidades para él tampoco han sido las mejores. En estos momentos, el padre de los niños está en Huila recogiendo café y no ha podido venir a verlos.
El derrumbe
“El lunes estaba lloviendo muy duro y como sabíamos que teníamos de vecino un pedazo de montaña, nos acostamos en la primera habitación. Llovió muy duro y a eso de las 3 de la madrugada escuchamos un sonido muy fuerte. Después todo fue un lodazal. La tierra enterró una cama cuna, la cocina, la ropa que estaba tendida en el patio y la ropa que teníamos guardada en un cajón”, describió.
Con la casa de esterilla y guadua en peligro, por la noche les toca llevar a los niños donde una pariente. Mi mamá y yo nos quedamos acá para evitar que alguien se nos entre. Podríamos decir que vivimos en pobreza extrema. Lo que conseguimos es para comer. Gracias a Dios los niños están todo el día en el Jardín”, dijo.
Lo más importante para la familia, es ser incluida en un programa de vivienda gratis. “Esta semana unos funcionarios de la Alcaldía nos visitaron y entregaron unas colchonetas y otras ayudas. Yo les dije que necesitábamos ser reubicadas, pero me dijeron que era complicado porque muchas personas estaban en lista de espera. Necesitamos que nos ayuden”, puntualizó.
Las lluvias continuarán
César Augusto Gutiérrez, secretario de Ambiente y Gestión del Riesgo municipal, invita a los ciudadanos a estar atentos y prevenir incidentes puesto que las lluvias en la región van para largo. “Nosotros por estar ubicados entre dos cordilleras tenemos unos factores de clima especiales, lo que hace que se produzcan lluvias que no se pueden predecir por la velocidad de los vientos. Esto nos debe mantener alertas y vigilantes en los cambios intempestivos, acatando las recomendaciones para evitar que lamentar”, afirmó. Recomendó revisar la estructura de las viviendas verificando que no existan grietas o fisuras, y detallando la solidez del techo y columnas. También verificar el estado de postes e identificar árboles que puedan presentar un riesgo por caída y despejar sifones y cañerías.
Tome note
Además de la situación económica, Merly tiene pérdida auditiva y para escuchar bien necesita unos audífonos inalámbricos, pero hace un año no los tiene porque la EPS no se los entrega. “Casi no escucho y ese es otro inconveniente para conseguir trabajo. Estoy afiliada a Medimás y por más que he gestionado los audífonos no ha sido posible”, expresó.
