Alumnos de la Academia de Artes Marciales AnyinSan buscan competir a nivel nacional, pero les han negado apoyos

Fotos suministradas.

Frank Joe Hoyos, entrenador de la Academia de Artes Marciales AnyinSan, continúa con la labor que ha venido desempeñando por décadas: Formar a niños y jóvenes ibaguereños en diferentes disciplinas de las artes marciales. Esta encomiable tarea que realiza de manera gratuita junto a su esposa e hija, con niños y niñas de escasos recursos, solo necesita un apoyo extra, ya que muchos de sus alumnos se ven en dificultades para asistir a las clases y contar con los elementos requeridos, con miras a convertirse en futuros embajadores del deporte tolimense. 

Entrenando duro

La Concha Acústica Garzón y Collazos es el escenario donde a diario los alumnos de la Academia AnyinSan se congregan para realizar los exigentes entrenamientos, entre las 7:00 y las 9:00 de la noche, bajo la supervisión del profesor Frank Joe Hoyos, quien cuenta con aval de la Federación Internacional de Artes Marciales, siendo Séptimo Dan. Los arduos entrenamientos siempre tienen como objetivo llevar a los ‘pelaos’ a competencias nacionales, donde su academia ha obtenido varios reconocimientos.

Además, los chicos pueden asistir de manera gratuita, pues no se les cobra ni por inscripción, ni por mensualidades. “El único requisito además de la motivación es llevar una camiseta blanca y un pantalón negro. Lo demás lo cubre la academia”, indica el profesor Hoyos. El ‘semillero marcialista’ busca llegar a la próxima Copa Colombia. 

Recientemente, se llevó a cabo el grado de cinturón negro de seis niños y próximamente es el seminario de grado de otro grupo de alumnos, quienes podrán asistir a los Juegos Nacionales. 

Con dificultades

Sin embargo, esta labor no ha sido fácil. En primer lugar, porque muchos alumnos de la academia no cuentan con los recursos para adquirir uniformes que son costosos. Además, algunos chicos deben desplazarse desde sectores como El Salado para asistir a la formación a diario. La academia intenta solventar cuanto es posible, pero la práctica de estas disciplinas requiere de materiales.

“Hablé con muchas entidades, pero solo nos han apoyado María Fernanda Oyola, madre de uno de los alumnos, quien donó camisetas; Moisés Morales del Hotel Casa Morales, quien donó mercados para los chicos de escasos recursos; y Juan Raúl Solórzano, de Playa Hawái, regaló entradas para que los ‘pelaos’ tuvieran una tarde de esparcimiento.

En cuanto a instituciones, Hoyos indicó que el Imdri no le puede prestar apoyo, puesto que para acceder a él, debería conformar un club. Pero al hacerlo, tendría que cobrarles a los alumnos, algo que no desea. El ‘profe’ ha solicitado apoyo con varias entidades, incluídas la Alcaldía de Ibagué y la Gobernación del Tolima, pero a la fecha no ha sido atendido. Tampoco por parte de Indeportes ha habido respuesta. Mientras tanto, los jóvenes han tenido que seguir entrenando con ‘las uñas’ y con el apoyo de AnyinSan.

Démosle una mano a los ‘pelaos’

El profesor Frank Joe Hoyos hace un llamado a empresas, entidades gubernamentales, otras Academias o Ligas de Artes Marciales y comunidad en general para que quienes deseen apoyar esta labor y a los futuros campeones tolimenses, donen uniformes, kimonos, cascos, paletas de pateo y demás implementos necesarios en la práctica de las artes marciales. Su número de contacto es 320 3412472.

DATO

Taekwondo, karate do, karate full contact, ninjutsu y hap kido son las artes marciales en las que se forman los alumnos de AnyinSan.

TOME NOTA

El grado de Séptimo Dan en karate se le otorga a maestros que “poseen el dominio interno, y tienen el conocimiento profundo de las técnicas y de la tradición de las artes marciales”.

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