La medalla de Mercedes Pérez se buscó, se luchó y se trabajó, hasta el último momento, hasta el último intento.
Cuando la pesista de China Taipei Wen-Hiei Chen falló en dos oportunidades en los 130 kilos, el camino quedó abierto para que la colombiana, en su tercer intento, buscara la marca de los 131 kilos, para quedarse con la medalla de bronce, pero Mercedes no lo consiguió y tuvo que resignarse con el cuarto lugar, la misma casilla que ocupó en Rio-2016, en los 63 kilos en ese entonces.
“Obviamente queda ese sinsabor de que pudimos ser medallistas, luchamos hasta el último momento porque ya nos quedaba solo eso, luchar por la medalla de bronce y por eso se manejó la estrategia de bajar un kilo, por el movimiento que estaba haciendo”, contó el técnico colombiano Luis Arrieta.
“Estaba bastante nerviosa, lo noté desde su pesaje. Dialogué con ella y le dije que se calmara un poco, que tenía que respirar más pausado, creo que sintió presión porque la competencia se veía aparentemente fácil. La ganadora del primer lugar hizo unas marcas que Mercedes hace en los entrenamientos”, confesó Arrieta.
Con ese resultado de 227 kilos en el total (101 en arranque y 126 en envión), Mercedes terminó en el cuarto lugar, que le significó a Colombia un nuevo diploma olímpico, el segundo en Tokio 2020, con el obtenido también por Rigoberto Urán en el ciclismo de ruta. Ahora el turno en el levantamiento de pesas es para Santiago Rodallegas, quien debutará en unos Juegos Olímpicos, el próximo sábado 31 de julio.