IBAGUÉ. La zozobra porque en cualquier momento se puede caer la casa, no deja dormir en paz a Cenobia Vargas, de 68 años, quien necesita ayuda para poder salir con su hija quien sufre de discapacidad cognitiva.
La mujer llegó a Ibagué hace un año a enterrar a su mamá, pero por falta de recursos económicos no ha podido regresar a Villavicencio y actualmente teme por su vida y la de su hija, ya que las guaduas que sostienen la vivienda están dañadas por lo viejas.
Además del peligro de la casa, el agua que cae en las noches o en le día, inunda la residencia y daña las cosas.
Vargas le dijo a Q’HUBO: “Necesito una ayuda para irme con mi hija a Villavicencio”, manifestó.
La afectada no sólo requiere de un poco de dinero, sino también de colchonetas, sábanas, pañales y medicamentos para su hija.
El humilde rancho representa un peligro para sus habitantes, que podrían ser víctimas de una tragedia.